Muchas empresas solicitan imprimir materiales que ofrezcan alta flexibilidad, propiedades antideslizantes o características que eviten vibraciones. Hasta la aparición de las impresoras 3D de pellets, imprimir materiales flexibles era toda una odisea, pero gracias a este nuevo formato para imprimir y modificar la composición del material TPU, podemos llegar a simular diversos materiales tales como la silicona.
En la actualidad, las impresoras 3D se utilizan como una herramienta más en muchas empresas. Cada vez más personas ven la fabricación aditiva como otro proceso de fabricación que complementa sus oficinas técnicas y talleres, y es por ello que la impresión 3D ha tenido que adaptarse a las necesidades industriales y a su lenguaje.